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Pensamiento del día

  /  Pensamiento del día (Page 34)

DIOS SE VUELVE CONTRA SUS HIJOS PARA PURIFICARLOS Y SANEARLOS Isaías 1,23 Tus jefes, revoltosos y aliados con bandidos. Cada cual ama el soborno y va tras los regalos. Al huérfano no hacen justicia y el pleito de la viuda no llega hasta ellos. 24 Por eso- oráculo del Señor Yahveh Sebaot, el Fuerte de Israel-: "¡Ay!

CON ADVERSIDADES DIOS AMONESTA A SUS HIJOS Job 36,21 Guárdate de inclinarte hacia la iniquidad, que por eso te ha probado la aflicción. Sabiduría 11,9 Las pruebas que padecieron, si bien con misericordia corregidos - les dieron a entender a que torturas un juicio airado sometía a los impíos; 10 pues a ellos les probabas como Padre que

SOPORTAR LA IRA DE DIOS CON ESPIRITU DE EXPIACION Miqueas 7,9 La cólera de Yahvéh soportaré, ya que he pecado contra él, hasta que él juzgue mi cusa y ejecute mi juicio; el me sacará a la luz, y yo contemplaré su justicia.

A VECES LA ADVERSIDAD ES CASTIGO DEL PECADO I Macabeos 6,13 Pero ahora caigo en cuenta de los malos que hice en Jerusalén 13 Reconozco que por esta causa me han sobrevenido los males presentes, y muero de inmensa pesadumbre en tierra extraña.

NO ADMIRARSE DE QUE VENGA I Pedro 4,12 Queridos, no os extrañéis del fuego que ha prendido en medio de vosotros para probarnos, como si os sucediera algo extraño. 13 sino alegraos en la medida en que participáis en los sufrimientos de Cristo, para que también os alegréis alborozados en la revelación de su gloria.

LA COMUNION DE MARIA CON JESUS Ve pender de la cruz entre dos ladrones que tantas veces había visto obrar milagros en medio del pueblo;  contempla, vuelto casi como un leproso por el estrago de las heridas, al que había concedido la curación a muchos leprosos; mira, oprimido por innumerables dolores, al que había expulsado el dolor

LA COMUNION DE MARIA CON JESUS Compadécete ahora, alma mía, a la Virgen dolorosa, a la Madre lagrimosa, a María amorosa. Si amas a María, debes compadecerla por sus dolores tan numerosos, para que te socorra en tus penas. ¡Que cuadro!: la Santa Madre llora a su único Hijo; llora María a Cleofás a su querido pariente;

LA COMUNION DE MARIA CON JESUS ¡ Es verdaderamente grande este llanto en Jerusalén! Détente, pues tú también un poco, y aprende a llorar de la Virgen María: sus amargas lágrimas podrán conmover tu corazón en lo más profundo. Hela ahí de pie junto a la cruz, atormentada por intensos dolores, a aquella que un lejano día,